#CartaDeLectores Corte de luz.

Es de noche y estás en tu casa. El invierno comienza a sentirse cada vez más día a día en el ambiente. Estás recreándote con algo tecnológico sin nada más por hacer.

Se te corta la luz, lo cual imposibilita que sigas con lo que estabas haciendo. Insultás efusivamente a tu proveedor hasta al hartazgo. Día eterno, cargado de cosas, y en este momento de no querer hacer nada más ocurre esto.

¿Qué te pones a hacer? Te puede quedar un poco de batería en el celular, pero preferís reservarla porque no tenés ni idea cuánto puede llegar a durar el corte.

Entonces, repito, ¿qué haces? Al margen de lo típico, lo normal: Prender velas para iluminar o alguna linterna.

Más de uno podrá pensar o reflexionar; por lo tanto, se va a dar cuenta que hace mucho tiempo no se dedicaba tiempo a sí mismo para hacerlo.

Capaz, si hace un profundo análisis, va a poder trazar un camino en sí mismo en el que pueda hasta resolver algunos problemas que constantemente le sucumbían. Si encara bien la situación va a poder sacarle un gran provecho, en momentos que no tiene nada por hacer además de eso.

A la cuarentena la tomo igual. Es literalmente lo mismo. Obviamente que dejando de lado la preocupación económica y a aquellas personas que han salido ampliamente desfavorecidas -lamentablemente- en esta pandemia.

Estos momentos que estamos viviendo es, en su totalidad un corte de luz, pero de nuestras vidas.

Como todo corte de luz, dentro de todo lo malo, podremos hacer las cosas que siempre posponemos y nunca hacemos. Podremos frenar a reflexionar acerca de cualquier cosa y/o situación que estemos atravesando en nuestras vidas.

Podemos empezar a emprender aquel sueño que siempre tuvimos y nunca pudimos arrancarlo por falta de tiempo; podemos meditar sobre nuestra realidad y hacer lo más difícil: conocernos a nosotros mismos, te aseguro que no es tan fácil y sencillo como parece; podemos proyectar nuestro futuro, cómo vamos a actuar, cómo vamos a ser y qué queremos cambiar en nosotros cuando todo vuelva a la normalidad.

Dentro de todo lo malo que podramos estar pasando tenemos que intentar de encontrarle la vuelta positiva a esta cuarentena de la forma que sea. Pensá que lo más probable es que nunca más volvamos a vivir algo así en nuestras vidas.

Yo que vos dejo de angustiarme e intento encontrale la vuelta adecuada a este momento en que todo el mundo está puesto a prueba.

Ojalá logremos salir mejores de esta cuarentena que fue -y va a seguir siendo- larga para todos. Fuerzas.